Todo era tan especial en ese día. Desempacando lentamente el tiempo se iba rápido, las cajas entrando, gracias a la ayuda de su hermano, mientras ella mira hacia afuera, por la ventana. El sol atraviesa las cortinas, una ligera brisa lo confirma todo:
Esta nueva vida será perfecta.
Justo hace dos meses se le invitó a Mina a formar parte de una gran empresa que desarrolla aplicaciones móviles (apps), ella es analista de seguridad. Hace 5 meses que terminó su maestría y ha vivido de la caridad gracias a su ambición por tener la computadora de sus sueños, desde la que puede hacerlo todo. Ahora Mina tiene el combo ideal:
- Maestría.
- Trabajo nuevo, muy bien remunerado.
- Súper computadora.
- Departamento amplio con una buena vista.
- Novio casi formal del cual está enamorada y vive muy cerca de su nuevo departamento.
¿Qué podría salir mal?
— Pon las bolsas juntas por favor— Dice Mina en un tono de Hermana mandona. – ¿Me estas escuchando bobo? Donde sea que estés.
— ¡Ya te oí loca, deja de gritar! Fui por la última bolsa al auto. – Se escucha desde afuera del departamento.
Mina mira nostálgicamente sus cajas de documentos y dice para sí misma:
— Aquí es donde mis dos vidas se encuentran, la pasada está dentro de estas cajas y la nueva en este bonito departamento.
— ¡AAAAAH! –Grita Antonio, el hermano de Mina – Sigo diciendo que te convendría más un departamento amueblado.
¡PAF! – Suena la última bolsa de ropa al caer sobre las demás.
— Deja de llorar, además prometiste que si te ayudaba a comprar tu computadora tú me ayudarías en esto.
— Que irónicamente no he usado por tener que ayudarte.— Dice Antonio quien se recarga en unas cajas de cartón apiladas. – Además qué onda contigo ¿Por qué estas vestida así? ¿Vienes del burdel o qué onda?
— Hace calor, déjame en paz, además es un bikini, no es como si le estuviese enseñando los calzones a todo el mundo ¿Has visto a tu alrededor? Es una zona muy tranquila.
Mina tan sólo lleva un traje de baño de dos piezas y un overol muy corto que no deja nada a la imaginación.
— Es precisamente en estas zonas tranquilas donde los psicópatas se esconden, acechan y se roban tus calzones.
— Claro, habla la voz de la experiencia.
Antonio se sonroja y comienza a balbucear.
— ¿Q—q—qué insinúas flaca nerda?
— Nada, nada. Pero ahora que lo mencionas no sé si ya que vivo aquí la atractiva vecina de al lado de la casa de nuestros padres se encuentre segura.
— ¡Eso fue un accidente! Cambiemos de tema.
Sin comentarios.
Mina busca meticulosamente en una caja de cartón que recién abrió,
— ¿Qué tanto buscas loca? – Pregunta Antonio
— ¡Qué te importa esclavo! No seas chismoso. –Contesta Mina.— ¡Aquí está! ¡Lo encontré! Ven a ver esto Antoine .
Antonio se acerca lentamente.
— Cho… Chocolate, si, debí imaginarlo.
Mina babea mientras admira su caja de deliciosos chocolates.
— Entonces no quieres ¿Verdad? – Dice Mina
— ¿De qué estás hablando? Claro que quiero, sabes que es una tradición familiar.
— Claro, sabía que no te negarías.
DIN DON – Justo cuando ambos se disponen a compartir una caja de chocolates, suena el timbre.
— ¡AH! Debe ser que llegó Mi estación de trabajo por correo. – Supone Mina.
— ¿Te la mandaste por mensajería? –Pregunta Antonio.
— Sí, tú sabes que es un poco grande.
Mina se asoma e inclina a través de la ventana y grita:
— ¡Hola, estoy aquí arriba, en un momento bajo con usted!
Una persona con uniforme, desde la calle responde:
— OK— Al mismo tiempo que saluda con su mano.
Mina voltea, y camina hacia la puerta de entrada del departamento.
— Tenía razón, ya la trajeron.
Salen del edificio y la misma persona con uniforme se acerca y dice:
— Paquete para la señorita Mina.
— Sí, soy yo.
Antonio se asombra al ver el tamaño de la caja. Es una caja de madera de alrededor de 1.5 m de altura, por 1.5 de profundidad y 2 de largo.
— ¿Wow, en esa caja está tu Workstation? – Pregunta Antonio.
— Es enorme ¿no?
El mensajero interrumpe para que firme de recibido el paquete.
— Firme aquí por favor.
— Sí, gracias.
Minutos más tarde y con la caja dentro del departamento.
— Bien hecho esclavo, te ganaste tus croquetas, me sorprende tu habilidad con la polea. —Antonio muestra una cara de molestia y cansancio.— Ahora sólo tenemos que abrir…
BRRRR – Un ruido extraño sale de dentro de la caja
— ¿¡Q — Qué le hiciste a la caja tarado!?
— ¡Yo no le hice nada, vieja loca! ¿Tú qué tanto metiste ahí?
BRRRRRRRRR — Una especie de zumbido se hace más fuerte hasta que todo queda en silencio.
La caja se rompe de manera explosiva por un lado, algo sale de dentro de la caja ¡algo enorme!
La explosión mandó a ambos al piso, desde ahí los dos están temblando y sudando.
— ¿Q — Qué mierda es eso? – Pregunta Mina.
— Ni puta idea – Dice Antonio.
Una especie de animal enorme de cuello alargado está frente a ellos.
— MIIIIIIIIIIIU – Se alcanza a escuchar una especie de maullido del extraño animal.
Al parecer es ¡Un gato gigante de cuello largo!
El gato tiene una hoja pegada en el cuello. Antonio se acerca con cuidado a leerla.
— ¿Qué clase de broma estúpida es esta? – Dice Antonio.
— ¿Qué pasa? ¿Qué dice? – Desesperada balbucea Mina
— “CRIUM: Gato anaconda del Amazonas – artículo de Wikipedia, la enciclopedia libre”
— ¡¿Qué?! – Grita Mina – ¿Y mi computadora? ¿Qué diablos hace este estúpido gato gigante en la caja de mi computadora?
— Debieron haberse equivocado de paquete, esta cosa iría a un zoológico o algo así. – Dice Antonio.
— ¡No! Yo misma empaqué y marqué la caja para reconocerla a simple vista, de otro modo no la habría aceptado ¡Esos bastardos violaron la privacidad de mi costosa e importante súper computadora!
— —MIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIUUUUUUUU – Se escucha al gato.
— ¿Qué pretendes? Estúpido gato ¡voy a hacer tamales con tu carne si no encontramos mi máquina! – Grita Mina.
— ¡Aguanta Mina! – Interrumpe Antonio, quien siguió leyendo en silencio. – ¡No hagas enojar al gato!
— —¿De qué estás hablando? Sólo es un estúpido gato enorme y gordo como marrano.
— ¡Es un estúpido gato que come humanos! – Exclama Antonio.
Rápidamente la vida de Mina pasa a través de sus ojos mientras siente la áspera lengua del gato rozar con su mejilla y observa los enormes dientes afilados cual cuchillo de carnicero.
Antonio se lanza sobre Mina y la jala hacia el closet que está en la pared y cierra las puertas, Mina está atónita, no se puede mover, no sabe qué hacer.
Justo el día en que Mina cambió su vida, todo se fue al carajo, su computadora contiene archivos muy importantes, datos de empresas, datos de su nuevo trabajo. Mina está a punto de conocer una de las peores pesadillas de su vida: Vivir con un CRIUM.
Capítulo 1
Riiing, riiing, riiing – suena el teléfono en la oficina de mensajería LOGISTICS pero todo se ve oscuro, parece un lugar recientemente abandonado, nadie contesta.
En el departamento de Mina, el gato ha comenzado a devorar el televisor y la situación en el closet no es menos tensa (Su acción más “inteligente” fue esconderse en un closet).
— ¿Qué está pasando? – Dice Antonio.
Mina voltea a verlo con una expresión de que su vida se acaba de ir al carajo.
— Na… na… na… nadie contesta. – Tartamudea como profesional.
— ¡¿Pero qué?! – Antonio grita desesperado — ¡No podemos quedarnos aquí, ese gato ya se va a acabar la tele!
— GRRRRRYAU – Dice el gato en tono amenazante.
— ¡WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – gritan al unísono mientras se abrazan mutuamente y escuchan como se acerca a las puertas del closet. La imponente sombra del minino se ve moverse en el umbral de las puertas del closet cerrado pero súbitamente se escucha una voz:
— ¿Mina? Hola amor vine a ayudarte, la puerta estaba abierta y…
Un grito interrumpe esta voz y dice:
— ¡NOOOO! ¡No entres! – Es Mina quien reconoce la voz de su novio y lo previene.
— Qué haces tonta, si haces más ruido el gato va a venir a comernos. – Dice Antonio
— No entiendes, mi novio detesta a los gatos ¡tengo que salvarlo!
— ¿Qué diablos dices? si tú misma te estabas cagando del susto cómo vas a defenderlo del gato, tu novio ya está grandecito, deja que se lo coma, al fin que me cae mal – Antonio sostiene de las piernas a Mina para evitar que salga del closet.
Pronto Mina comienza a recordar.
Dos meses antes de que Mina se mudara al departamento, ella y su novio se encontraban acostados ambos en un sillón hablando de futuro juntos:
Ella — ¿Y si llegamos a tener una mascota?
Él – Te dejo
Ella – Oye, espera, ni siquiera lo pensaste
Él – Lo siento Mina, en primer lugar soy alérgico al pelo de las mascotas, en segundo lugar no soporto a los animales, incluso tengo que advertirte que si llego a ver una mascota en tu casa sentiré que me estas retando.
Ella – ¿Ni aunque fuera un pequeñísimo e indefenso, pusilánime, pachón, peludo con ojitos de pulguita pedorra perro—gato—ardilla?
Él – Amor, no sé si intentas convencerme de tener o no tener una mascota o un engendro ultra tierno, el punto es que no, no soporto mascotas.
Una semana después, al caminar cerca de un parque, una bola de pelos (y cuando me refiero a una bola de pelos quiero decir UNA BOLA DE PELOS, no un animal peludo), cual rodadora del desierto atacó y casi mató al novio de Mina. El punto estaba casi claro: o el pelo de animales domésticos del mundo odiaban al novio de Mina o él tenía una alergia tan terrible que temía por su vida al ver a una mascota lanuda.
Fin del recuerdo.
— ¡Debo hacer algo para salvarlo! – Piensa Mina.
Mientras tanto el novio de Mina camina lentamente entre las cajas y bolsas que tapan un poco la entrada y dice:
— ¿Mina? ¿Dónde te metiste?
El gato ha desaparecido de la habitación, está acechando al novio de Mina.
— ¡Déjame ir Antonio! Si él ve al gato me dejará y estaré sola y con un gato enorme ¿Sabes lo que eso significa? ¿Nunca has visto las películas de las señoras que se quedan solteronas y llenas de gatos?
— ¡Preocúpate más por si te comen tarada!
— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! – Un grito terrible por parte del galanazo interrumpe el forcejeo en el closet.
El novio de Mina corre despavorido y detrás de él sale el gato, lo único que se escucha en el closet es un grito alejándose.
Mina voltea a ver a Antonio y su cara de desolación se hace presente.
— E — Espera Mina, no seas pesimista, no crees que cualquier persona común pensaría que probablemente es, no sé, un gato enorme que… Híjole la neta no sé ni qué decirte, pero ojalá lo haya agarrado confesado. – Dice Antonio.
— ¡No entiendes lo que está pasando Antoine! Justo en menos de una hora, perdí mi computadora, donde tenía todo mi trabajo, y eso conlleva dejar éste departamento, y como mi novio encontró al estúpido gatote él no volverá a dirigirme la palabra, es más, ¡es muy probable que haya muerto atacado por bolas de pelo!…
— ¿Muerto atacado por bolas de pelo? Mi hermana… Está bien pinche loca. – Piensa Antonio.
— … Sé que suena estúpido pero creo que el pelo y mi novio son enemigos naturales, también el gato se comió la tele, y estamos encerrados aquí sin saber dónde está o cuándo nos comerá, pero el asunto es que lo perdí todo Antoine, estoy muerta.
La mirada de desolación de Mina hace que Antonio tome valor.
Antonio se levanta, desliza la puerta del closet y mira un poco hacia afuera. Saca la cabeza y voltea hacia la izquierda y después hacia la derecha, no ve rastros del gato o el novio.
— Parece que podemos huir ahora, lo importante es que salgamos vivos de ésta, después pensaremos qué hacer con lo de tu trabajo y lo demás. – Dice Antonio, con un aire heroico.
— Antoine, gracias, se nota que has madurado – Mina se ve más tranquila.
Ambos dan un paso afuera del closet y entonces, de las sombras… Del lado derecho, junto a la ventana, en un rincón vacío donde la luz no entra, al lado del montón de bolsas y casi junto a la puerta de la habitación contigua, en una sombra que nadie verá pues no está dibujado en las páginas manga de esta novela, ahí, justo ahí, se ve emerger la cabeza y los ojos brillosos del gatote.
Lo miran y quedan paralizados.
— MIUUUUUUUUUUU – Dice el gato.
Antonio empuja hacia afuera a Mina, Mina cae en la alfombra, Antonio vuelve a entrar al closet y dice:
— Lo siento, la madurez llega con un engrandecimiento espiritual intenso, no soy digno de tales dones.
— ¡TÚ, MARICÓN! ¡COBARDE! ¡ME VA A COMER EL PINCHE GATO!— Grita Mina.
El gato se acerca lentamente, ella recobra las energías y se levanta y corre hacia la puerta de entrada del departamento, entonces siente como si le dieran un almohadazo en la cabeza, pero era un golpe de la pata el gato, lo cual la derribó rápidamente y desde el piso, mina dice:
— Auch, Pinche gato, si me dolió.
— MIUUUUUUUUUUUU – Dice el gato.
Con su enorme pata acerca una hoja hacia Mina, tiene algo escrito y subrayado:
— ¿Qué es esto? – Mina recoge la hoja y comienza a leer:
Estimada señorita Mina:
Usted acaba de adquirir un exótico y valioso gato y su deber desde ahora es cuidarlo, rara vez se otorga este gran privilegio a un humano común, pero usted ha sido seleccionada para cuidar y mantener a salvo al magnífico CRIUM, que es el Dios gato en muchas culturas. Lo siguiente es una lista de cosas que puede usted conseguir fácilmente para alimentar al CRIUM y evitar ser comida del gran Dios Gato:
- Perros pequeños (prefiere PUGS)
- Electrodomésticos (Los que tengan motor le provocan gases y las lavadoras oxidadas le provocan diarrea)
- No intente darle croquetas pues afilaría más sus dientes y sería contraproducente.
- No le de las sobras de la cena porque se las escupirá en la cara.
Siéntase honrada de haber sido seleccionada para mantener a salvo esta rara especie en extinción, todos aquellos honrados con este privilegio han aceptado gustosos y eventualmente toleran las exigencias de este noble Dios gato.
P.D.: Evite, por cualquier medio, ser comida, le deseamos lo mejor.
La cara de tonta es notable, tal vez Mina haya roto un récord, lo que es cierto es que a partir de ahora la vida de Mina está hecha un caos.