La saga del estudio Rockstar Grand Theft Auto, es una de las entregas que ha revolucionado el mundo de los videojuegos con su modo de sand box, que sumerge al jugador en urbes llenas de violencias, humor, sátira política y sobre todo velocidad, generalmente tomamos el papel de un Handyman, un hombre que dentro del mundo de la mafia puede tomar y realizar cualquier trabajo, que básicamente se resume balas, carros y mujeres. La saga toma una relevancia al colocarnos en el papel de un hombre malo, las primeras entregas junto con sus expansiones, estamos hablando de GTA y GTA II, con su expansión de Londres, se basaba en un punto de vista aéreo teniendo una naturaleza arcade puesto que se trataba de un juego basado en un sistema de puntos.
El juego evolucionó para la tercera entrega el mítico GTA III que nos abre la puerta a Liberty City, una especie de parodia de Nueva York, en la década de los 2000, donde tomamos el papel de Claude Speed, un asalta bancos que se ve traicionado por su antigua compañera Catalina, iniciando una búsqueda de venganza que lo hará ganar aliados y enemigos en la maldita ciudad, es curioso pensar que esa también sería la premisa de la cuarta entrega, ya hablaremos de ese argumento, el juego fue premiado, alabado y causo mucha alarma entre el sector conservador europeo y norteamericano.
Después llegó el título con el que muchos de los fans llegaron a la saga: GTA Vice City, protagonizado por el mejor: Tommy Vercetti, antiguo miembro de la mafia Forelli, que después de quince años en la cárcel, nuestro protagonista es seleccionado para iniciar un nuevo negocio en el tráfico de drogas, todo esto ambientado en los ochenta, estilo, actuaciones memorables y una serie de elementos que lo convirtieron en un clásico, atrayendo a muchos video jugadores, pero aquí el punto fuerte es la música, una selección perfecta que cubre todos los momentos de la historia, siendo el punto culminante el tema de cierre del juego; una joya musical. Después vino San Andreas, la joya de la corona, de los gta, un juego que sin bien no adquiere el estilo de su predecesor, tiene una carga brutal y nos recuerda ese cine de pandillas en la urbe de la clase media norteamericana, el drama, la lírica en la calle y la vida en los guettos, esa esencia fue atrapada por el GTA San andreas.
El estudio se arriesgo con entregas portátiles con historias a la altura de las entregas de consola, y que después hicieron su aparición en play station 2, los gta stories, y ya sabemos el resto, la historia nos ha dejado sin palabras para describir el impacto de los gta en los videojuegos y si creíamos haber visto todo, aparece GTA 4.
El gta 4 inaugura un nuevo momento en la historia de los GTA, terminando el ciclo de historias conectadas entre sí, entramos a una nueva Liberty City, esencias y elementos diferentes, aunque no alcanza a representar en su totalidad la vida de una ciudad como Nueva York, si nos ofrece un nuevo campo de juego para nuestra necesidad de destrucción, pero esto sería demasiado fácil, lo curioso de éste juego es que no te invita a romper las reglas, no como en el GTA III, en donde podías iniciar un tiroteo, huir y seguir matando, no la Liberty city del GTA IV te invita a seguir sus reglas, te invita a sentirte parte de la ciudad, esto para un jugador antaño es algo intimidante, algo que abruma, es demasiada información, amigos, sin armas, con poco dinero, sin un contacto de poder que te reciba, realmente te sientes como un don nadie cuando empiezas el juego, no como Johnny -protagonista de THE LOST AND DAMMED- que tiene una pandilla poderosa que se va acabando a lo largo del juego, o como Luis -protagonista de THE BALLAD OF GAY TONY- que ya tiene de antemano la cartera y la posición de su jefe, no, Niko Bellic, nuestro anti héroe de la ciudad comienza sin nada, con una necesidad de venganza y un contacto que no se relaciona con el crimen.
Debo decir que la historia es realista, al terminar el juego no te conviertes en un gran capo, no eres el dueño de la ciudad, la ciudad es demasiado grande para controlarla y todos aquellos que piensan que la tienen, mueren por arrogantes, algo que si sentí es que el juego es demasiado fácil, las misiones no parecieran ser muy cambiantes, no hay misiones en contra del tiempo, incluso hay ciertas misiones en donde pareciera que ya hay un camino predeterminado para resolver el puzzle que representa la misión, Pero ¿por qué? Porque el juego mantiene una escena realista, no hay mucho riesgo, debo decir que esto se rompe con los DLC y con el GTA V, el cambiar un negocio es algo que muy pocos juegos pueden hacer, pero esto los mantiene en el ojo del huracán, ser el dueño del mundo no te permite tener errores.
Hace diez años, la cuarta entrega llegó a nuestras consolas, celebramos el arribo de Niko Bellic, un pistolero que pretende cambiar el mundo, nosotros tenemos el control.
A diez años de cambiar el mundo, ¿Qué nos espera para la sexta entrega?