Las historias policíacas y basadas en el cine negro de los 50’s parecen una excelente fuente de inspiración para nuevas aventuras, e historias intrincadas que nos pueden dejar tras cada capítulo con una curiosidad de la resolución del gran caso, y B The beginning no es la excepción: tiene de todo, mitología, acción, romance y una gran animación entre otros muchos puntos a su favor, pero justamente el tener tantos elementos tan llamativos lo termina complicando, haciendo que el total de sus capítulos no sean lo suficientemente largos para un desarrollo de personajes a la altura de su historia.
La trama
La historia principal, termina teniendo bastantes vertientes en torno al antihéroe, antagonista y después personaje, no se si llamarlo principal pero si detonante. Un asesino que en todas sus incursiones deja la marca de una B y un 4 en números romanos sobrepuesto, quien solo se dedica a cazar a otros asesinos, todos relacionados con su pasado, con una antigua leyenda acerca de unos dioses que habitan entre humanos y un grupo de policias que terminan enredados en una trama de niveles insospechados y que pueden trastocar a toda la nación de Cremona. Pero el no es el eje principal que llevará la historia, éste es Keith.
Keith
Keith es un investigador retirado que es quien más sabe del asesino B, y que en su intento por resolver los misterios que envuelven a su cacería, deberá enfrentarse a su pasado.
Y llegado a este punto, el seguir hablando de su trama nos haría soltar aún más spoilers sobre el mismo. Por lo que si no la ha visto, está disponible para verse en Netflix.
Son capítulos para verse con total atención si se pretende no dejar escapar ningún detalle. Pero al contrario de los referentes en que puedo pensar, tales como Psychopass o Cowboy Bebop, las cuales a pesar de mantener el misterio principal, supieron no enredar e irse por un solo género.
Una serie que sin lugar a dudas pudo desarrollarse durante más episodios para un mejor desarrollo de las subtramas que la envuelven.
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